En jardines, restaurantes y hasta en casa, tenemos tantas ganas de ponernos guapas y salir, que este verano el lugar de destino es lo que menos nos importa.
El reencuentro con familiares y amigos para celebrar juntos bodas y aniversarios es ahora la mayor motivación. Ha llegado el momento de encontrar un vestido de invitada que nos haga sentir radiantes y transmita la alegría de poder compartir en vivo ese momento tan especial.
Para ayudarnos a escoger la prenda que mejor encajará con nuestro físico y personalidad, la diseñadora Almudena Lisbona, directora creativa de la firma española Violeta Vergara, nos presenta una guía infalible para acertar con el color de nuestro vestido de invitada este verano.
Lisbona apuesta por vestidos lisos de tonos intensos que “transmiten toda la ilusión y la alegría que hemos tenido reprimidas durante dos meses”. La clave para acertar con la elección es saber qué colores nos sientan mejor y cuáles encajan mejor con nuestro estilo y personalidad.
Amapola, el color de la pasión que sienta bien a todas
Si eres una mujer intensa en la que afloran las emociones solo con pensar en ese momento de reencuentro con las personas que estás deseando volver a ver, tu color es el rojo, y si es el intenso amapola, mucho mejor.
Tú decides si lo combinas con un maquillaje neutro, unas sandalias nude y complementos discretos o todo lo contrario. “Funcionará también con un labial en el mismo tono, sandalias doradas y unos pendientes llamativos”, recomienda Lisbona.
Rosa, el más primaveral de toda la paleta
La diseñadora propone dos tonos rosa muy favorecedores para dos estilos diferentes de mujer: uno más claro y edulcorado que sienta de maravilla y acapara las miradas, el otro otro vibrante y atrevido, “conseguirá que no pases desapercibida”, asegura la diseñadora de Violeta Vergara.
El rosa pastel te gustará si buscas destacar tu belleza con un aire delicado, sea cual sea el tono de tu cabello y tu piel. El rosa buganvilla será la mejor alternativa si te consideras diferente y lo que buscas es reflejar en tu estilismo todo tu entusiasmo y personalidad.
Mostaza, el reflejo de la luz y la alegría
Un color para las que tienen un espíritu joven y lleno de positividad. El mostaza te hace brillar y según con qué tonos lo combines, conseguirás un resultado diferente y original.
Un vestido monocolor corto, largo o midi que resaltará las pieles cálidas y cabellos oscuros, embellecerá también a las rubias que los acompañen con detalles coloridos como un labial intenso o un tocado de fantasía.
Mint, el pastel más fresco es irresistible
Entrégate a uno de los colores de moda más favorecedores de la temporada. “El Mint te conquista desde el momento en que te lo pruebas, lo sé por experiencia propia y por lo que veo en mis clientas”, relata la diseñadora.
Con su mezcla de optimismo y frescura, este color encaja a la perfección si tu especialidad es transmitir vibraciones positivas.
Para que este color funcione y acertar con la pieza, Lisbona destaca que es importante “dar con el tono perfecto, ni apagado ni demasiado flúor, y por supuesto, que el tejido sea de buena calidad”.
Marino, el clásico que nunca decepciona
El color azul marino es una apuesta segura y te dará resultado seas como seas. Rubias, morenas, pelirrojas, anchas o delgadas, jóvenes y maduras, todas tienen en este tono un aliado seguro para triunfar. “Con el marino te aseguras de que irás elegante, te favorecerá y lo podrás combinar con fácilmente para llevarlo a un gran evento y después reutilizarlo para salir a cenar o con amigas”, argumenta la creativa.
Viste y estiliza, combina genial con blanco, rojo, dorado y plata, pero también con muchos otros como los nude o el turquesa. Sin duda, un color versátil que nunca pasa de moda.
Petróleo, el moderno marca de la casa
Es la versión oscura y sofisticada del turquesa, y en Violeta Vergara no dejan de apostar por este color que triunfa en sus diseños durante todo el año. “Este tono triunfa entre las clientas que quieren innovar en su armario huyendo de los colores típicos sin renunciar a la elegancia”, comenta Lisbona.
El color petróleo es una de las marcas de la casa y su demanda es tal que se agota hasta el tejido. Un truco de la diseñadora para rematar el look: “combínalo con el pintalabios más fuerte que tengas y una copita de vino en la mano”.
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