Desde la Finca La Rinconada, en la reserva Natural «Riberas de Castronuño – Vega del Duero», la bodega Barcolobo ofrece sus vinos hechos con una total dedicación y tradición. Cuidando con mucho mimo tanto la materia prima como el privilegiado paisaje en el que se encuentran. Y es en ese entorno tan excepcional donde nace su vino rosado Lacrimae Rerum.
Este rosado es el resultado de un proceso de vendimia manual de uvas tempranillo y su almacenaje y transformación en pequeñas cantidades para no estropear la materia prima. Para su elaboración, se evita la uva estrujada optando por la despalillada para obtener un sangrado de mosto ideal. La fermentación de éste se realiza durante dos meses en barricas de roble francés.
Este proceso resulta en un vino de un espectacular rosa pálido, palote, chuche, brillante con leves aromas florales, violeta y rosa.
Cata del vino
La cata de este vino permite apreciar sus sabores, que reflejan una composición armónica entre una leve acidez y un toque de frescura. Ese sabor con toque refrescante hace que el vino rosado sea uno de los mejores acompañantes para los postres, especialmente para aquellos basados en el chocolate o en frutas como la manzana o los frutos rojos.
Pero este tipo de vinos tiene muchos más maridajes que el espectro dulce. Gracias a su suavidad y ligereza son una combinación ideal para platos que no sean demasiado fuertes que no tapen su sabor, como es el caso de las ensaladas.
Además sus notas frutales hacen que sea el complemento estrella para pescados y mariscos, platos de pasta o recetas con arroz, especialmente las paellas. Es recomendable que estas comidas sean siempre poco condimentadas para darle el protagonismo al vino y siempre resultará un acierto seguro si el plato lleva alguna variedad de queso.
Por eso este 8 de Marzo no existe mejor opción que celebrar el día de las Mujeres brindando con el Lacrimae Rerum de la bodega Barcolobo.
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